Cada vez que Jesús dijo yo soy, manifestó quien era él, a qué cosa se podía comparar, mostrando toda la importancia que él tenía para Dios, cuan clave es para los redimidos y necesario para el hombre que está en tinieblas.

Agregar un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *

A %d blogueros les gusta esto: