Una enfermedad que nos asusta, el temor a la soledad, la pérdida de un hijo, un matrimonio difícil o una angustia que no puedo explicar. Son todas situaciones de la vida que nos toca enfrentar, nos asustan, nos aprietan el estómago y a veces perjudican nuestra salud. Levanto mi mano y mi mirada al cielo y le digo al Señor “¿Por qué hay que sufrir?” Me mira con esa mirada tierna, esa misma mirada que tengo cuando veo a mi hija frustrarse porque no puede abrochar sus zapatos sola, se enoja, llora y me abraza por verse superada por el peso de la frustración y mientras la abrazo le digo que debe intentarlo nuevamente que ya lo logrará.
Cuando veo al cielo en medio de la aflicción esa es la mirada que recibo o se parece tanto. El apóstol Pablo aquejado por una enfermedad pide a Dios por su sanidad, un Pablo que había sido usado por Dios para sanar a otros, que había sido protegido sobrenaturalmente por Dios recibió del cielo una respuesta que seguramente no esperaba: “Bastate de mí gracia, mi poder se perfecciona en la debilidad”. Fue como si le dijera: “Estoy, por medio de la aflicción puliendo tu vida para que mi poder se manifieste aún más”. ¡Cuánto nos cuesta entender esta realidad! el propósito de Dios es la formación del carácter de Cristo en cada redimido y para esto la aflicción y los temores nos perfeccionan, la debilidad de la carne nos hace abandonar todas las falsas certezas de la vida y nos desnuda tal cual somos como seres humanos; Integralmente débiles y carentes. Esa nueva comprensión quebranta el corazón para que la gloria y gracia de Dios se manifieste en un redimido.
Cuando Dios me mira desde el cielo en medio de la aflicción veo en esa mirada que todo esto tiene un propósito mucho mejor y eso me hace sentir que a pesar de las circunstancias esa mirada es suficiente para recibir paz.
Debes conocer a Cristo, debes arrepentirte y creer en el evangelio sólo así tu aflicción tendrá un propósito y un gran beneficio, si estás sufriendo contáctanos, pide ayuda podemos ayudarte.
Si quieres contactarnos para que oremos por ti o recibas esa
ayuda que necesitas escríbenos a contacto@mtna.tv